Muchas empresas y autónomos consideran innecesario invertir en una auditoría financiera. Sin embargo, toda organización necesita este tipo de servicio de una manera más o menos frecuente. La razón está clara. Es fundamental evaluar la gestión económica y contable para tomar mejores decisiones. Muchos negocios que se van a la quiebra terminan en esta situación por no haber hecho una auditoría de este tipo.
¿Qué hace una auditoría financiera?
En una auditoría financiera lo que se hace es observar y analizar toda la documentación económica que tenga una empresa en concreto. Para ello, se tendrá que tener acceso a las cuentas anuales, registros y comprobantes de todo el dinero que entra y sale de la organización. Asimismo, también se va a hacer una evaluación de si se está actuando conforme a la normativa vigente en España.
Tras realizar todas las comprobaciones mencionadas, que pueden llevar más o menos tiempo dependiendo de lo grande y complejo que sea un negocio, las conclusiones se van a reflejar en un informe financiero. En él quedarán constancia los datos recopilados, las medidas de mejora en la gestión del dinero y aquellos puntos que deben cambiarse lo antes posible. Todo esto determinará los próximos pasos a seguir.
Por qué es importante esta auditoría
La auditoría financiera tiene un impacto importante en las decisiones que se tome con respecto a la empresa. Saber qué está haciendo que el negocio no cuente con el ahorro suficiente o en qué está invirtiendo el dinero puede ayudar a clarificar hacia dónde se quiere realmente que este se dirija. Es posible plantearse la ampliación de la empresa, abrir una nueva sucursal o incluso contratar a más personal en algunos casos.
Pero, si hay algo en lo que influye positivamente contar con una auditoría financiera es en generar confianza en posibles profesionales que quieran comprar acciones o invertir en la empresa. Tener las cuentas organizadas y al día mostrará el cuidado que se tiene por analizar la situación financiera de la organización y de la transparencia que con esto se pretende ofrecer. Además, se aportará información veraz, algo valorable.
Otro aspecto fundamental de una auditoría financiera es que ayuda a hacer cambios que impacten de una forma positiva en la economía de la empresa. A veces, hay procesos que se pueden mejorar para que el trabajo se optimice mucho más y se pueda asumir en mayor cantidad. Pero, para esto es necesario poder disponer de los resultados que brinda una auditoría, en caso contrario, será difícil saber qué modificar.
Planificar a medio-largo plazo será más sencillo
La planificación a medio y largo plazo es necesaria para poder tener una visión más clara de lo que hacer y no hacer en el futuro. Puede que haya que tomar una serie de decisiones para que la empresa no pierda tanto dinero, aunque también se pueden reorientar los esfuerzos para aumentar la rentabilidad del negocio. Los planteamientos y las posibilidades estarán determinadas por ese informe de la auditoría financiera.
En el mundo empresarial son varios los negocios que no podrían haber seguido adelante de no ser por una auditoría financiera. A veces, hay aspectos de la contabilidad que se pasan por alto, incluso errores que pueden suponer una sanción económica importante. Para evitar todo esto, la auditoría es esencial. Pondrá en orden todos estos aspectos para poder tomar mejores decisiones.
En Capital Auditors ofrecemos un servicio de auditoría financiera con el que poder mostrar a posibles inversores, proveedores, bancos, etc., cuál es la situación real de una empresa, persona física o jurídica. Sin embargo, sus beneficios van más allá de todo esto. Con una auditoría cualquier profesional puede tener más oportunidades de que su negocio crezca y se expanda.