Un ERE (expediente de regulación de empleo) es una de las situaciones menos deseables para una empresa. Se plantea en un escenario donde el negocio pasa por dificultades económicas y necesita hacer recortes para poder continuar con su actividad. Cuando cierto número de puestos de trabajos se ven afectados, entonces la autoridad laboral interviene para asegurar que se realiza con todas las garantías.
Una de las principales cuestiones cuando se plantea un ERE es que deben existir causas justificadas para su realización. En las empresas que lo soliciten se deben dar ciertas circunstancias que expliquen una planificación económica en la que se de un recorte en los puestos de trabajo.
Para ello se realizan estudios económicos donde se analiza la situación del negocio y se da explicación a los motivos que llevan a la reducción del empleo. Pueden darse varias situaciones por las que una empresa decida realizar un ERE:
– Por causas económicas. En este supuesto, se deberá demostrar una disminución de ingresos por un largo periodo de tiempo. En concreto durante tres trimestres consecutivos las cifras deben ser menores que las del ejercicio anterior.
Se deberá demostrar que la planificación económica necesaria para la vialidad de la empresa deberá pasar por un ajuste en los puestos de trabajo.
– Por causas técnicas. En muchas ocasiones las innovaciones tecnológicas permiten la reducción del número de trabajadores para la realización de una tarea. En estos casos la planificación económica cambia radicalmente y se hace necesario la realización de un ERE.
En estos casos, el informe económico deberá explicar de manera minuciosa esta optimización en los procesos de trabajo y la necesidad de la empresa de realizar los ajustes.
– Por causas de la producción. Por alguna causa externa a la empresa la demanda se puede ver disminuida. En esta situación se necesita reducir la mano de obra para ajustarla a las necesidades productivas.
Para la aplicación del ERE en estas circunstancias, el informe justifica una planificación económica acorde con las circunstancias del mercado. El empleo se ve afectado por el normal funcionamiento en la venta de determinados productos.
– Por cuestiones organizativas. En estos casos la planificación económica es necesaria para optimizar el uso de los recursos. La empresa tiene que demostrar que aplicando otros procesos de trabajo consigue mayores beneficios.
La aplicación de estos nuevos métodos puede suponer que los puestos de trabajo se vean reducidos o reestructurados.
Maneras en las que un ERE puede afectar al empleo
Además de la justificación del ERE, el estudio económico debe analizar la medida que favorezca la viabilidad de las empresas. Depende del efecto que tenga sobre el puesto de trabajo se pueden encontrar tres tipos de recortes:
– Suspensión temporal del empleo. Los trabajadores no trabajarán durante tiempos determinados establecidos en el ERE. Es una de las medidas con menos impacto y se aplica sobre todo cuando en la planificación económica se prevé una recuperación de las empresas en un plazo determinado.
– Reducción de las jornadas de empleo. En estos casos se pretende una optimización de la planificación económica con un ajuste de las horas que cada empleado trabaja. Así se consigue maximizar los recursos de las empresas sin que nadie tenga que perder su trabajo.
– Extinción de la relación laboral. El trabajador pierde su empleo y la relación con las empresas termina. Es lo que se conoce como despido colectivo. La situación menos deseable en un ERE pero que es necesaria para la supervivencia de la empresa.
La realización de un ERE requiere de una planificación económica cuidada que asegure que la empresa pueda permanecer activa después de la situación de crisis. En Capital Auditors contamos con especialistas en el ámbito laboral que te ofrecen el mejor asesoramiento para este tipo de trámites. ¡Contacta ya con nuestro equipo para conseguir la solución que mejor se adapte a tus necesidades!
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